
Artículos

Buscamos en los demás lo que queremos para nosotros
por Xavi Santamaría
Todos en la vida hemos tenido un grupo de amigos, alguien muy próximo, gente con la que te relacionas por trabajo o por motivos diversos y en un momento concreto, algunas veces sin saber el motivo, otras de forma abrupta o traumática, o de manera dulce, amorosa y apacible, nos hemos separado de ellos, alejándonos y los caminos que recorríamos, se han bifurcado tomando rumbos diferentes.
Lo exterior es un reflejo de lo interior, así aquellos con los que te relacionas más intensamente durante un periodo de tiempo ya sea largo o corto son un reflejo de ti mismo, ya que “buscamos en los demás lo que queremos para nosotros”.
Ser consciente de la gente que te acompaña durante tu camino, de quien te rodea, de cuáles son sus inquietudes, de que y como se mueven, te ayudará a encontrarte a ti mismo, verte y comprenderte pues son tu propio reflejo.
Quizá eres tú, o quizá sean ellos los que han decidido consciente o inconscientemente separarse, por diferentes motivos que en algunas ocasiones no llegamos a vislumbrar o entender y que pueden dejarnos una gran sensación de vacío interior.
Cuando llega ese instante, tienes que observar las señales y seguir tu camino con gratitud y amor hacia ellos, pues eso es elegir lo que te conviene y deseas y si te queda esa sensación de vacío, si los observar después, desde la distancia, te darás cuenta que quizá ya no te resonaban o no te sentías conectados con ellos.
Ese espacio que ocupaban, puede ser rellenado con una sensación de vacío, suéltala … pues una vez vacíes realmente ese espacio y este quede libre, cuando sueltes ese sentimiento, esa sensación, permitirás que ese lugar sea ocupado por otras persona que están ya de camino a tu encuentro.
Una vez ese espacio ya este de nuevo lleno, al observar tu nuevo entorno, encontraras esa complicad y esos valores que te mueven a ti ahora, quizá, ahora desde ese nuevo núcleo puedas verlo y observaras que en esa antigua relación poco a poco, casi sin darte cuenta había desaparecido todo eso y reconocerás los cambios que ya han germinado en ti.
No todo el mundo tiene la misma velocidad ni el mismo camino y dejar volar a aquellos que te acompañaron es un acto de amor al igual que permitirte a ti mismo volar es una acto de amor para contigo mismo.
Si crees sentir pena, analiza bien tus sentimientos, pues si sientes amor y gratitud hacia ellos, el sentimiento más probable quizá no sea pena, sea compasión o misericordia y si fuere así ese es un sentimiento maravilloso, pues es desearles que hayan podido ver lo que tu viste y andar lo que tu anduviste y eso es desearles lo mejor, pero recuerda que nadie tiene la verdad absoluta de nada y quizá lo que tu viste o aprendiste no es lo que ellos debían ver o no era su momento.
Se conscientes de las amistades que tienes, de sus valores y sus patrones, te ayudara a ser más auto-consciente, y… cerrar una etapa porque ya no te resuenan o bien porque ves donde están anclados y ya no conectas con ellos y decides seguir tu camino es un acto de madurez y de control sobre tu vida pues así permites que entren cosas nuevas y seguir creciendo.
Feliz de la gente que te rodea… feliz por cerrar etapas…